“CADA MIRADA ES ÚNICA Y TIENE SU LENGUAJE. CONTAMOS CON MUCHAS TÉCNICAS, PERO JAMÁS DEBEMOS ARRIESGARNOS A ALTERAR ESE LENGUAJE”
PÁRPADOS CAÍDOS, OJERAS MARCADAS, CEJAS DESCENDENTES… HAY MUCHOS FACTORES QUE AFECTAN A LA MIRADA, HACEN QUE PIERDA FUERZA Y LA TRANSFORMAN EN TRISTE Y CANSADA. ¿Podemos revertir la situación?
Además del exceso de piel en los párpados hay otros factores que influyen en la intención de una mirada: las cejas caídas y curvadas hacia abajo la entristecen; las dos arrugas verticales del entrecejo le dan un aspecto enfadado, y el exceso de grasa en el párpado inferior hace que los ojos parezcan cansados, lo mismo que cuando el eje de los ojos es descendente. La doctora Lidici Santana añade la inestimable ayuda del bótox encargado de elevar la cola de la ceja y alisar las patas de gallo, -invasión mínima, resultados máximos- que se adapta muy bien a los deseos de la paciente, esta técnica pone ojitos a la medicina estética por ser casi indolora, rápida y respetuosa con la vida profesional y social. La Doctora Santana es partidaria de empezar pronto con técnicas estéticas para retrasar la plástica.
Si hay algo que encandila a los médicos estéticos en este momento es acabar con las ojeras rellenando la depresión con ácido hialurónico hasta hacerlas desaparecer por completo, dando un aspecto vital al rostro. ¿La candidata perfecta? Según la Doctora, “prácticamente todas a partir de los cuarenta”, dice. A partir de esta edad la grasa de la cara empieza a desaparecer, la zona interna del párpado inferior empieza a hundirse y los pómulos pierden presencia, lo que se traduce en una ojera marcada y profunda con el consiguiente aspecto de cansancio que proporciona también un pigmento oscuro entre marrón, amarillo y violáceo, la pigmentación tiene una solución muy difícil que, de momento, sólo puede tratarse con cremas ricas en vitamina K, ¿Hay futuro para ellas? La Doctora Santana ha empezado a utilizar un peeling de última generación, “ARGININA” se llama, y la verdad es que está dando buenísimos resultados.
La Doctora Santana insiste mucho en que el relleno de las ojeras con ácido hialurónico exige mucha precisión y mucha prudencia por parte del médico. Lo inyectamos en el arco nasogeniano, una de las partes del rostro más sensibles a las infiltraciones y los resultados han sido buenísimos. A veces aplicamos una crema anestésica, más por su efecto vasoconstrictor que anestésico, porque me ayuda a reducir los hematomas, inevitables cuando pinchas las ojeras.
La dosis de ácido que se utiliza es pequeñísima, y se inyecta con la técnica de punteado o, como explica, en “retrograda”, algo más molesta. “Hay que ir muy despacio, no pinchar demasiado superficial, ni demasiado profundo y tener mucha pericia”. Si le sobra hialurónico lo inyecta en la cola de la ceja para dar un poco de volumen y luz a la zona. Cuando acaba de pinchar, se masajea la zona para difundir bien el ácido hialurónico. Luego, dos o tres días con una ligerísima inflamación y algo más de un año para disfrutar de los resultados Con el BÓTOX, la Doctora Santana suele trabajar las cejas planas y bajas, inyectando los músculos implicados para subirla entera y ampliar el párpado; en las que tienen mucho arco, intenta suavizar la forma levantando los dos extremos, y en las cejas medias-bajas, lo que hace es levantar la cola de la ceja.